Carrer de les Arts Gràfiques, 9
Valencia, España
Tel. 963 394 443
www.apapacho.es
El mejor regalo Náhuatl
Llegaron sin hacer ruido, y a una zona de marcado ambiente estudiantil, pero desde el primer día se convirtió en mi destino gastronómico por excelencia del barrio. Oscar Pecero y Ana Llopis. Ellos son Apapacho y es lo mejor que te puede pasar un día cualquiera…
Apapacho está en la Calle Artes Gráficas, una calle que todos los valencianos conocemos, pero no sabemos muy bien por qué. Ahora al menos ya sabéis que ahí, hay un local donde se come de la hostia, además de tener un servicio notable y una decoración exquisita.
He perdido la cuenta de la cantidad de veces que he comido/cenado allí, pero ya os adelanto que no son pocas y ninguna de ellas recuerdo nada negativo. Bueno sí, una de las primeras veces, el chipirón (calamar) a la brasa estaba lleno de tierra y tras unas disculpas por parte de sala y cocina, aquello quedó en algo anecdótico.
Creo haber probado toda la carta, las sugerencias fuera de ella, el menú de mediodía… y ¡qué bien se come joder! Y cómo se agradece esa fusión VascoMejicoValenciana. Vasca, porque allí se conocieron Oscar y Ana. Mejicana, por las raíces del cocinero, y su aporte en casi todos los platos, y valenciana por las propuestas que aquí se nos ofrecen. Mucho sabor, grandes emplatados y detalles muy cuidados.
Ana, es un amor que se encarga de la sala, y aunque está siempre pendiente de la misma, sí que es cierto que prefiere quedar en un segundo plano y darle el protagonismo a sus compañeros.
En cuanto al comer… recomiendo empezar con alguna inflada o entrante algo más llamativo y continuar con platos algo más clásicos. Eso sí, el anterior plato de vieiras con jugo de langostinos estaba infinitamente mejor que su actual propuesta a base de cítricos, sésamo y almendras.
Platos tan aparentemente sencillos como la ensalada de tomates o el pulpo frito son una delicia que no te puedes perder, al igual que el huevo poché, algo más complejo para compartir pero… ¿por qué hacerlo, no? Disfruta de ello como si no hubiera mañana.
Y como principales… si hace unas semanas destaqué el último Cabracho de el restaurante Gran Azul, no puedes irte de aquí sin probar el rape a la brasa. Es cierto que es un plato fuera de carta, así que igual no lo encuentras todos los días. No importa. Si tienes que ir veinte veces hasta que puedas comértelo, hazlo y sino, llámales y dile a Oscar que si no va él a comprarlo, te presentarás tú en el restaurante con el pez sapo para que te lo prepare como esa última vez.
También puedes terminar con otro tipo de pescado o de carne, pero si tiras más por lo carnívoro, decántate por el chuletón (y con hueso). No trabajan maduraciones muy largas, sino todo lo contrario, apenas 45 días, pero aún así, no defrauda. Lo dicho, pidas lo que pidas, hagas lo que hagas, te darán ganas de entrar en cocina y “apacharles” fuertemente.
Apapacho no tiene la publicidad que se merece, pero mejor. Yo la agradezco, pues es un gran rincón al cual puedes ir cualquier día de la semana, sin estar pendiente de reservas, de turnos o de masificaciones de gente.
Lo mejor: Oscar y su cocina
Lo mejorable: Oscar, sal a la sala de vez en cuando
Lo peor: Oscar, ¡quiero las vieiras de antes!
Restaurante Apapacho
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