Va de Bo (Valencia)

Calle de Finlàndia, 7
Valencia
Tel. 622 03 64 13
www.vadeborestaurante.es

Aquí empieza la fama

Pese a su juventud, Xavi Climent tiene recorrido y no en las cocinas de cualquiera, pero ahora ha llegado el momento de la verdad. Su cocina, su propio restaurante. Ahora sí que sí, ¡va de bo Xavi!

Hay bajos comerciales que se les pone la etiqueta de “malditos”, que por mucho que hagan, no triunfan. Uno de ellos es el de Martínez Ferrando, por el que tanto Imperdible, como Nómada pasaron sin pena ni gloria. Otro de esos bajos es el que nos ocupa, en una calle mucho menos transitada pero con la misma mala fortuna. Primero fue Q de Barella, luego Favela Bistró y ahora Va de Bo. Yo no creo en las maldiciones, y sí en la gente que hace las cosas bien, y que estés donde estés, si gustas, la gente te irá a buscar. Lo escribe alguien que iba a menudo al, allí perdido en la nada, Vinícolas, del genio Raúl Aleixandre.

De la cocina de Va de Bo salen platos muy sugerentes, que me gustan bastante y con una vajilla super bonita y elegante, pero es una pena que a todo esto, el servicio de sala no le acompañe. Y no es que las chicas no le pongan ganas, amabilidad… pero falta mucha profesionalidad y atención alrededor de una mesa. Da rabia, pues con una sala a la altura, el restante de Xavi Climent sería mucho más completo.

Obviamente, en la cocina también hay fallos. Todas las croquetas están visualmente perfectamente bien ejecutadas, en cuanto a tamaño, rebozado, textura, presentación… pero sólo la de atún tiene presencia y sabor en boca. Tanto la de sepia como la de bacalao necesitan darles una vuelta.

El otro tirón de orejas y quizás el más importante es el tartar de atún. Es muy flojo, con un excesivo aliño de aceite de sésamo y una temperatura demasiado fría. ¿Y las patatas paja por encima? Mmm menos mal que no había aguacate debajo o katsuobushi por encima.

La carta es un recetario más bien tradicional, y eso me gusta. No falta la titaina, ni el all i pebre, ni la sepia con mayonesa… también hay alguna propuesta algo más original aunque demasiado manida hoy en día, como los molletes o los brioches, pero en general, muy bien resueltos.

Y notables son esos platos de pescados como el dentón o el calamar (espectacular) Ah, y lo más importante, los arroces. Qué gusto encontrar otro sitio donde comerte una buena paella. En aluminio, gran diámetro, perfecta cantidad de arroz, socarrat, muy buen sabor… para muchos les parecerá escasa la ración, sin embargo, yo disfruto con sitios así. Chapeau Xavi.

En resumen, Va De Bo es un restaurante al cual le veo futuro, al igual que a su cocinero. Si sigue por este camino y consigue hacerse con un equipo a la altura, este nuevo local se convertirá un sitio de peregrinación muy habitual. No olviden pedirle a Xavi el buñuelo de higo (sólo en temporada) y ya luego me comentan que tal.

Lo mejor: Los arroces
Lo mejorable: El servicio de sala no está a la altura
Lo peor: Algún que otro plato

Va de Bo Restaurant
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